Se inauguró oficialmente el proyecto de Recuperación de Adolescentes y Jóvenes con Adicción a las Drogas. La iniciativa, que está enmarcada en un convenio de cooperación técnica entre el Obispado de San Isidro y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), prevé la apertura de cuatro Centros Barriales Diocesanos para asistir a jóvenes adictos o en situación de riesgo. El lanzamiento se realizó en el Colegio Parroquial Domingo Savio ubicado en el barrio La Cava, Beccar.

Los oradores fueron el obispo de San Isidro, Monseñor Oscar Ojea, y José Luis Lupo Flores, gerente del Departamento de Países del Cono Sur del BID. Estuvieron presentes el senador provincial Sebastián Galmarini, la Secretaria de Política Sanitaria y Desarrollo Humano de Tigre, Malena Massa y la concejala de San Isidro Marcela Durrieu.

Galmarini celebró el trabajo de articulación entre la Iglesia, el BID y los municipios que firmaron el acuerdo de cooperación mutua. “Es muy positivo que distintos sectores de nuestra comunidad se junten para trabajar en políticas orientadas a prevenir las adicciones. Estamos frente a una propuesta de abordaje integral de la problemática, que incluye a quienes ya están atrapados por la droga y aquellos pibes que estén en riesgo, con un fuerte trabajo comunitario en poblaciones vulnerables. Es un área donde la gestión del gobernador Scioli brilla por su ausencia", afirmó el legislador.

El Obispado de San Isidro abrirá cuatro centros barriales en zonas vulnerables del territorio diocesano con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y los municipios de San Isidro, Tigre y Vicente López.

La presidenta del bloque de concejales del Frente Renovador en San Isidro, Marcela Durrieu, elogió la actitud de Monseñor Ojea: “Aplaudimos que el Obispado impulse estas iniciativas para poder contar también en San Isidro con dos centros de contención para los jóvenes en barrios tan complejos como el Bajo Boulogne y La Cava. Desde nuestro espacio venimos planteando iniciativas para que se ataque a la problemática de la droga en todas sus dimensiones. Estamos convencidos que son los municipios los que tienen mejores oportunidades de llegar a las personas con adicciones por su cercanía institucional y geográfica”.